Los párpados son una de las partes más importantes de nuestros ojos y también una de las más delicadas. Por ello, el cuidado diario y una buena limpieza palpebral son prácticas fundamentales para mantener en buen estado nuestra visión y prevenir la aparición de problemas oculares de distinto orden.
Características y funciones del párpado
La piel de los párpados es la más sensible del rostro por ser extremadamente fina (tan solo 0,33 mm de grosor) y su escasa protección natural hace que se deshidrate más fácilmente que otras partes del rostro. Dentro de la visión, los párpados cumplen con las siguientes funciones:
Protección: se encargan de la protección de la córnea, es decir, de la estructura externa del globo ocular que posibilita la visión. Actúa como barrera frente a agentes externos, sustancias contaminantes y excesos de luz.
Hidratación: al parpadear, se uniformiza la película lagrimal para mantener la córnea húmeda y se segregan lípidos para mantener una buena calidad de la lágrima.
5 consejos para cuidar los párpados y la visión
1. Limpieza palpebral
Hacerlo es imprescindible para evitar la aparición de afecciones de tipo ocular como la irritación o la blefaritis. Realizar una limpieza completa al menos dos veces al día, una por la mañana y una por la noche, es esencial, especialmente si te maquillas. La limpieza de párpados debe realizarse de forma suave y delicada con productos específicamente formulados para esta zona y que, además de respetarla a nivel dermatológico, también cumplan una función oftálmica.
La limpieza de la zona palpebral con toallitas oftálmicas estériles ayuda a limpiar impurezas, costras y restos de maquillaje presentes en la zona de los párpados y la piel sin agredir las capas superiores de la epidermis. Esta limpieza ayuda también a drenar las glándulas del borde del párpado y a mejorar así la secreción de grasa y la calidad de la lágrima. Acciones esenciales en la prevención de la blefaritis.
¿Qué es la blefaritis?
La blefaritis es una afección ocular que inflama los párpados debido a la proliferación excesiva de bacterias, causando la acumulación de secreciones y costras en la zona. Se calcula que afecta, a distintos niveles, a más de un 30% de la población y, si no se trata correctamente, puede derivar en problemas de sequedad ocular, aparición de orzuelos o inflamaciones de la córnea.
Para la limpieza de los párpados, es recomendable utilizar unas toallitas indicadas para la blefaritis, como las toallitas oftálmicas con tecnología plata, que ayudan a mantener el balnce natural de la piel y la preservan frente a infecciones.
2. Hidratación por dentro y por fuera
Como hemos comentado, la zona de los párpados tiende a deshidratarse con mayor facilidad que otras. Para combatirlo, es imprescindible beber agua de forma abundante y diaria. De esta forma, se consigue que la piel de la zona mantenga los niveles de hidratación necesarios para cumplir con sus funciones.
3. Ante párpados hinchados, aplicación de toallitas
Si notas que tus párpados están hinchados, una de las formas más eficaces de aliviarlo es aplicando sobre ellos unas toallitas oftálmicas estériles frías durante unos minutos.
Para problemas de blefaritis, hinchazones o secreciones persistentes, puedes aplicar toallitas oftálmicas estériles con tecnología plata en caliente realizando un suave masaje palpebral y dejándolas encima del párpado durante unos minutos.
4. Descansos visuales
Si tu trabajo implica pasar muchas horas delante de pantallas o con la vista fija en un punto concreto, tus párpados pueden sufrir las consecuencias del estrés visual. Realiza descansos visuales mirando durante 30 segundos a un punto lejano —mínimo una vez cada hora— o realizando breves paseos por la oficina, podrás descansar la vista y si es el caso, la sensación de ojos hinchados.
5. Alivio de la sequedad ocular
En caso de notar los ojos secos en tu día a día, ya sea por un trabajo prolongado frente al ordenador, por una operación de vista o por el uso de lentes de contacto, aplica una solución oftálmica hidratante para proporcionar un alivio inmediato en casos de irritación, sequedad o sensación de cuerpos extraños en los ojos. Calmará la molestia y ayudará a la humidificación de los párpados.