La vista es un sentido fundamental para nuestra vida diaria, y mantener su salud es esencial para una buena calidad de vida. Cuando surge algún problema ocular o simplemente se necesita una revisión de la visión, dos profesionales médicos entran en escena: el oftalmólogo y el optometrista. Ambos son expertos en el cuidado de la salud visual, pero tienen enfoques y capacitaciones diferentes.
En este artículo, analizaremos en detalle las diferencias y similitudes entre estos dos profesionales y cómo trabajan en conjunto para brindar una atención integral a sus pacientes.
¿Qué es y qué hace un oftalmólogo?
Un oftalmólogo es un médico especializado en oftalmología, la rama de la medicina que se enfoca en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades oculares y trastornos visuales. Comúnmente se le conoce como oculista,
Los oftalmólogos son profesionales altamente calificados y están capacitados para llevar a cabo procedimientos médicos y quirúrgicos relacionados con el ojo y sus estructuras. Algunas de sus funciones principales incluyen:
- Diagnóstico y tratamiento de enfermedades oculares, como cataratas, glaucoma, retinopatía, entre otras.
- Realización de cirugías oculares, como cirugía de cataratas, corrección de estrabismo o cirugía refractiva (como LASIK).
- Prescripción de medicamentos para tratar infecciones oculares y otras afecciones.
- Manejo de casos de emergencia ocular y lesiones traumáticas.
El oftalmólogo u oculista no sólo trata los ojos, sino que se encarga de todas las partes que conforman el aparato visual:
- Ojos
- Párpados
- Aparato lagrimal
- Músculos extra oculares
- Via óptica hasta el cerebro (nervio ocular).
Los oftalmólogos pueden ser especialistas en alguna área concreta de la medicina ocular:
- Córnea
- Retina
- Cirugía refractiva
- Cirugía ocular pediátrica
- Neurooftalmología
- Oculoplastia
- Glaucoma
- Cataratas
¿Qué es un optometrista y qué hace?
El optometrista es un profesional de la salud visual que se enfoca en evaluar la visión y la salud ocular, pero no es médico. Los optometristas obtienen un título de licenciado en Optometría después de completar su formación en una escuela de optometría acreditada. Algunas de las funciones principales de un optometrista incluyen:
- Realización de exámenes de la vista para evaluar la agudeza visual y detectar problemas refractivos como miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia.
- Prescripción y adaptación de lentes correctivas, como anteojos y lentes de contacto.
- Determinar el grado en que los ojos realizan correctamente las funciones: de enfoque de imágenes, ocular-sensorial-motora y perceptual.
- Detección y manejo de problemas oculares comunes, como sequedad ocular, conjuntivitis y alergias oculares.
- Derivación de pacientes a oftalmólogos u otros especialistas médicos cuando se requiere un tratamiento o diagnóstico más avanzado.
El optometrista está especializado en los procesos de percepción de los ojos y la relación de éstos con actividades (aprendizaje, trabajo, ocio…). Está capacitado para ofrecer terapia visual de entrenamiento para aquellos pacientes que necesiten corregir ciertas deficiencias visuales y/o prevenir lesiones oculares.
El papel del optometrista es muy importante desde el punto de vista de la previsión. En las revisiones periódicas se pueden detectar enfermedades oculares en su etapa inicial, para después ser derivadas al oftalmólogo para su diagnóstico y tratamiento.
Diferencias entre oftalmólogos y optometristas:
1.Formación y educación:
– Oftalmólogos: Después de completar una licenciatura en medicina, deben realizar una residencia de al menos cuatro años en oftalmología para especializarse en el campo. Esto incluye formación en cirugía ocular y procedimientos médicos complejos.
– Optometristas: Después de completar una licenciatura universitaria, deben obtener un Doctorado en Optometría, que generalmente es un programa de cuatro años.
2.Alcance de la práctica:
– Oftalmólogos: Tienen un alcance de práctica más amplio y pueden diagnosticar y tratar una amplia gama de enfermedades oculares, además de realizar cirugías oculares.
– Optometristas: Se centran principalmente en la detección de problemas refractivos y el manejo de afecciones oculares comunes, pero no están autorizados para realizar cirugías oculares.
3.Tratamientos y procedimientos:
– Oftalmólogos: Pueden realizar procedimientos quirúrgicos, como cirugía de cataratas, cirugía refractiva y corrección de estrabismo.
– Optometristas: No realizan cirugías, pero pueden recetar medicamentos y lentes correctivas para corregir problemas visuales.
4.Enfoque de la atención:
– Oftalmólogos: Se ocupan de casos más complejos y enfermedades oculares que requieren atención médica especializada.
– Optometristas: Centran su atención en la prevención, detección y corrección de problemas visuales y oculares más comunes.
Colaboración entre oftalmólogos y optometristas
A pesar de sus diferencias, oftalmólogos y optometristas trabajan en conjunto para brindar una atención completa a los pacientes. La colaboración entre ambos es esencial para garantizar una evaluación y tratamiento exhaustivos de los problemas visuales y oculares. Algunas de las formas en que colaboran son:
- Remisiones: Cuando un optometrista detecta un problema ocular que requiere tratamiento médico o quirúrgico, deriva al paciente a un oftalmólogo para una evaluación más detallada y especializada.
- Seguimiento postoperatorio: Después de que un oftalmólogo realiza una cirugía ocular, el paciente puede ser remitido al optometrista para el seguimiento y la adaptación de lentes correctivas, si es necesario.
- Atención compartida: En algunos casos, un oftalmólogo y un optometrista pueden trabajar juntos para el manejo de enfermedades crónicas oculares, como el glaucoma, donde el oftalmólogo realiza el tratamiento médico o quirúrgico, y el optometrista realiza el seguimiento regular.
¿Cuándo tengo que ir al oftalmólogo?
Con lo que has leído hasta llegar a este punto, ya lo debes tener muy claro:
- Acudiremos al optometrista para: revisión de la vista, graduación de gafas o lentillas, problemas oculares comunes (sequedad ocular, conjuntivitis).
- Acudiremos al oftalmólogo para: problemas oculares poco comunes, traumatismos o heridas en los ojos, problemas de visión que requieran cirugía y/o tratamiento…
Debes acudir al oftalmólogo si te encuentras con uno de los siguientes síntomas:
- Dolor en los ojos;
- Ojo seco;
- Lagrimeo;
- Pérdida de visión;
- Enrojecimiento ocular.
Hay algunas afecciones de la vista que provocan defectos de visión, como el astigmatismo y la miopía, que son tratadas por oftalmólogos y optometristas, de manera combinada. El optometrista se encarga de la creación de las lentes correctivas y el seguimiento del paciente, mientras que el oftalmólogo es quien puede intervenirlo quirúrgicamente para corregir la deficiencia visual.
Otras afecciones visuales ligadas a la edad, como la presbicia (vista cansada) y las cataratas, son competencia del oftalmólogo, que valorará la conveniencia de intervenirlas quirúrgicamente.
Si la afección ocular que sufres puede ser debida a una infección, el oftalmólogo es el especialista al que debes acudir, ya que tiene capacidad y conocimientos para poder recetar medicamentos para el tratamiento de la vista.
Conclusión:
En resumen, tanto los oftalmólogos como los optometristas desempeñan un papel crucial en el cuidado de la salud visual de las personas. Mientras que los oftalmólogos son médicos especializados en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades oculares, los optometristas se centran en la detección y corrección de problemas visuales y oculares más comunes. Su colaboración garantiza una atención integral y bien coordinada para los pacientes, lo que contribuye a la preservación y mejora de la visión a lo largo de la vida. Siempre es importante programar revisiones regulares con ambos profesionales de la salud ocular.
Bibliografía
El oftalmólogo al servicio de la Sanidad; F.Silván López; Archivos de la Sociedad Oftalmológica Hispano-Americana, ISSN 0365-7051, vol. 13, nº11, 1953, págs.. 1345-1376