Si tu trabajo es frente a un ordenador, seguramente ya sepas de qué estamos hablando porque llevas bastantes meses realizándolo o en este último mes hayas vuelto a él. Sin embargo, aunque estés habituado/a, nunca vienen mal unos consejos para mantener buenos hábitos para la salud laboral, incluso desde casa.
VENTILA DIARIAMENTE TU ESPACIO DE TRABAJO
Es habitual que durante las épocas de frío quieras conservar el aire cálido de casa. Sin embargo, puede ser perjudicial para tus vías respiratorias, especialmente si padeces alergias o asma.
Ventila a diario tu estancia de trabajo para llenarla de nuevo de oxígeno, disipar los malos olores, mantener la humedad del aire controlada y deshacerte del polvo en suspensión. Con ello ganarás en calidad de aire, prevendrás la condensación y evitarás la proliferación de microorganismos.

MANTÉN UNA POSTURA CORRECTA Y HAZ PEQUEÑAS PAUSAS
Uno de los principales problemas de trabajar desde casa es que no adquirimos una postura erguida y saludable porque vinculamos el espacio al descanso.
Debes entender que mantener la misma postura durante muchas horas puede alterar el estado de tu columna, por lo que deberás esforzarte por mantener la espalda recta el máximo tiempo posible.
Realiza pausas cada hora y media de de 5 minutos. Descansa la vista, intenta dejar de fijarla constantemente en una pantalla (no pases del ordenador al móvil todo el rato) y si notas picor o incomodidad siempre puedes usar unas gotas de nuestra solución oftálmica calmante.
Caminar un poco también le dará un respiro a tu columna y a tu torso. Puedes aprovechar para salir a hacer un recado rápido, pasear a tu mascota o simplemente salir a tu balcón o terraza a respirar aire fresco si el día lo permite.
HAZ EJERCICIO ANTES, DURANTE O DESPUÉS DE TU JORNADA
Al pasar más tiempo en casa es habitual que muchas personas empiecen a descuidar el movimiento de su cuerpo, aunque se trate del momento en el que más lo necesitamos.
Al dejar de ir a trabajar también estamos dejando de caminar, de subir y bajar escaleras, de permanecer de pie… Por ello es necesario mantener cierta rutina de ejercicios que activen tu cuerpo.
No es saludable ni necesario que de repente practiques la calistenia en la barra de la ducha. Empezar por una rutina de ejercicios compuestos como sentadillas y flexiones será suficiente para empezar a reactivar tus músculos, quemar algunas calorías y adquirir una mejor forma. También puedes aprovechar las mañanas o las tardes para salir a hacer ejercicio al aire libre, depende de si eres más activo por la mañana o por las tardes.

MANTÉN UNA RUTINA
El desorden de horas puede alterar gravemente nuestro estado de salud mental y nuestro sueño. Por ello, intenta mantener ordenado tu espacio de trabajo y no generar “ruido” en tu mesa. Aleja aquellos objetos u elementos que puedan distraerte (y sí, eso incluye también tu móvil). Intenta no comer delante del ordenador, si no hacer pausas adecuadas para el desayuno y la comida.
Y, muy importante, respeta tu jornada laboral como la que realizarías en una oficina. Establece una hora de inicio y una hora final. Estar en tu propio domicilio puede generar la sensación de estar siempre disponible o pendiente del correo electrónico pero es importante para tu salud mental poner fin a tu jornada, aunque “ya estés en casa”.